@gabriel
Cuando empecé a tener huecos significativos en mi memoria (de esos que te dejan colgado en el medio de un diálogo y empezás a olvidar cosas que nunca olvidarías), consulté y terminé haciéndome dos tests: una resonancia que no dio nada anormal y un chequeo neurosicológico (o similar) que dictaminó que me faltaba descansar mejor.
Por suerte no tenía ni un tumor, ni una enfermedad degenerativa en lo cognitivo: era un tema de estrés.
Muchas veces sucedes, como bien dice @Peritocaligrafo , que la vida moderna nos impone actividades que redundan en distracciones "tontas". Ojo con eso.
Que lo inmediato no nos quite lo vital. No descartemos la posibilidad de entablar un nutritivo diálogo al aire libre mientras colgamos la ropa...